miércoles, 7 de septiembre de 2011

¿QUÉ ES LA OCE?





I

La educación de la población es de gran importancia para todos los países del mundo. De ella depende de manera definitiva el desarrollo material y cultural de la sociedad. El aparato educativo tiene la función de desarrollar la ciencia y la tecnología, bases del progreso económico de las pueblos, y también potenciar las artes, la cultura y las humanidades, fundamentales para cimentar la civilización y fortalecer a la humanidad en su espíritu y valores culturales.


La Organización Colombiana de Estudiantes se propone conquistar una educación democrática, científica y al servicio del pueblo y el desarrollo nacional. Por ello defendemos la educación pública, financiada adecuadamente por el Estado, requisito para que sea de alta calidad y para que a ella tengan acceso todos los niños y jóvenes de Colombia, sin importar su estrato social. La privatización de la educación es un atentado contra la calidad académica y deja a millones por fuera del sistema educativo.

La OCE agrupa a estudiantes de instituciones públicas y privadas de todo el país. Tenemos presencia en más de veinte universidades públicas, el SENA, institutos técnicos, cientos de colegios de secundaria de todo el país y en universidades privadas de varias ciudades capitales de Colombia. Actuando en conjunto con otras organizaciones estudiantiles hemos organizado y dirigido las más importantes luchas estudiantiles como el gran movimiento de jóvenes universitarios y de secundaria del primer semestre del año 2007, contra el Plan de Desarrollo de Uribe y el recorte de trasferencias territoriales para educación, salud y saneamiento básico.

II
Colombia se debate en la más profunda crisis de su historia. La dominación que sobre la nación ejerce el imperialismo hace más de cien años se ha intensificado de manera dramática en la etapa de la llamada globalización neoliberal, y esta pérdida de soberanía ha paralizado el desarrollo nacional y empobrecido a la casi totalidad de la población. Los Tratados de Libre Comercio -TLC- con Estados Unidos y otras potencias, como la Unión Europea, profundizan esta dominación y llevan el sufrimiento de los colombianos a extremos insoportables. Para llevar a cabo esta recolonización, el imperialismo cuenta con sus títeres en cada uno de los países sometidos. En Colombia los gringos cuentan con el gobierno vendepatria de Álvaro Uribe Vélez, quien ha implantado un régimen fascista y antidemocrático, sobre la base de la manipulación demagógica a través de los medios de comunicación y el fortalecimiento de sus aparatos de represión.

Nuestra organización se suma al caudaloso torrente de colombianos y colombianas que claman soberanía y democracia. El pueblo conquistará una nueva democracia que haga de Colombia una patria libre y soberana.

MÉTODOS DE LUCHA

Para adelantar sus luchas, la OCE utiliza los procedimientos de la Resistencia Civil, es decir, los métodos democráticos y civilizados mediante los cuales el estudiantado se organiza y moviliza. Desaprobamos el terrorismo y el uso de las armas como instrumentos de la lucha social y política. El movimiento estudiantil no debe permitirse actos vandálicos que el pueblo impugna como formas de reivindicar sus derechos. Abogamos por la lucha organizada y la movilización de las masas. Rechazamos los actos aventureros y asilados de pequeños grupos que menosprecian el paciente trabajo de concientización y organización de las mayorías estudiantiles.

III
La juventud estudiantil colombiana tiene el deber de vincularse con los procesos de trasformación social, puesto que en sus manos tiene no sólo las herramientas que le permiten conocer y comprender la realidad sino también la vitalidad y las energías que son necesarias para emprender tareas tan titánicas como las de la defensa y salvación de la educación pública y la cultura nacional, y la lucha por la soberanía nacional y la democracia.

La OCE, que tiene su origen en la Juventud Patriótica , brindará sus mejores esfuerzos para que tan encumbrados propósitos sean una realidad. Y aspira a que los estudiantes de toda Colombia asuman con entusiasmo el gran reto que les propone nuestro llamado.



POR UN PROGRAMA DEMOCRÁTICO Y ANTIIMPERIALISTA PARA LA JUVENTUD COLOMBIANA

Junio de 2001

LA CATASTROFE NACIONAL Y EDUCATIVA

Colombia sufre hoy su peor crisis en cien años. Desde que comenzó la política de apertura económica a comienzos de los noventa, los males seculares de la nación se han agravado enormemente. La industria y la agricultura quiebran masivamente. Cerca de la mitad de la población se encuentra desempleada o subempleada y en condiciones de pobreza extrema. De ser un país con un modesto grado de desarrollo industrial, Colombia pasó a desindustrializarse, perder la capacidad de alimentar a su propia población y renunciar al desarrollo científico y tecnológico. Campean el hacinamiento en las ciudades, la miseria en el campo, la quiebra generalizada de los hospitales y el gigantesco endeudamiento de las regiones, las cuales no tienen como satisfacer sus necesidades. La deuda externa se ha disparado y las exportaciones disminuyen.

A esta situación hemos sido llevados por una política neoliberal, que en la administración de Pastrana se ha radicalizado y que ha beneficiado a un puñado de monopolios nacionales e internacionales, perdiendo los últimos vestigios de soberanía nacional de forma tal que Estados Unidos no solamente moldea la política económica, sino que interviene en todos los aspectos de la vida nacional, incluyendo la creciente injerencia militar. El actual gobierno se empeña en privatizar las empresas más rentables del Estado, disminuir los ingresos de los trabajadores, debilitar al movimiento sindical y popular y aplicar todas las recetas recesivas exigidas por el Fondo Monetario Internacional.
La educación no se escapa de las catastróficas consecuencias de la política neoliberal. Miles de niños y jóvenes no tienen acceso a la educación y muchos de los que logran ingresar abandonan los planteles porque no pueden sufragar los costos educativos. Las universidades se encuentran quebradas. La calidad de la educación se deteriora por el recorte presupuestal, la imposición de esquemas privatizadores, la falta de equipos y textos, el abandono de la construcción de nuevas instalaciones, la carencia de actividades investigativas y la mengua en los ingresos de los maestros. La educación ha sido convertida en una mercancía sujeta a las reglas del mercado, buscando la máxima rentabilidad y considerándola un mero negocio. Esto significa que se ha impuesto un esquema privatizador, dentro del cual los establecimientos educativos oficiales son sometidos al nocivo criterio de autofinanciación que los obliga al alza permanente de matrículas.

La deserción estudiantil aumenta porque los jóvenes tienen que ayudar al sostenimiento de su familia o simplemente porque esta no puede costear sus gastos. Cerca de la mitad de los colombianos no termina el bachillerato, más del 70 por ciento de los niños no recibe ninguna educación preescolar y aproximadamente un 30% no culmina la educación primaria. El empobrecimiento de la población ha determinado un aumento de la deserción escolar y universitaria. Los estudiantes que egresan de los niveles medios no se encuentran calificados para desempeñar un trabajo y los que lo están no lo consiguen. A pesar de que la proporción de estudiantes universitarios en relación con la población total es muy baja, en un país necesitado de personal calificado, cunde el desempleo profesional.

El gasto en educación no alcanza a compensar el crecimiento de la población. La política educativa del actual gobierno, consignada en el Plan de Desarrollo, generaliza los llamados subsidios a la demanda, que en lugar de financiar adecuadamente las entidades educativas reparten algunas becas de miseria a una minoría de estudiantes, congela los recursos para la educación, busca entregar los establecimientos a la empresa privada y cede su responsabilidad a unos municipios totalmente quebrados. Además de los recortes presupuestales directos, la disminución de los gastos educativos se implementa a través de los denominados convenios de desempeño, los cuales exigen una reestructuración administrativa que reduzca los costos pero que en la práctica se limita a recortar la cantidad de maestros. a disminuir los costos reduciendo la cantidad de maestros. Aunque entre 1954 y 1996 el número promedio de años estudiado por los colombianos pasó de 3 a 6.8, este promedio aún está muy por debajo de los 9 años estipulados en la Constitución de 1991. Mientras que en 1982 se matriculaba en la universidad el 20% de los estudiantes graduados en bachillerato, en 1996 disminuyó al 16%. Según las estadísticas oficiales, 500,000 jóvenes abandonan anualmente la educación básica antes del grado noveno. Los matriculados en las universidades privadas aumentan con respecto a los de las oficiales, de tal forma que en 1996 había más del doble en carreras universitarias y postgrados privados que en las oficiales.

LA PRO-IMPERIALISTA POLÍTICA EDUCATIVA DEL GOBIERNO PASTRANA

Las reformas que el gobierno quiere introducir a la ya regresiva legislación universitaria, pretenden disminuir los aportes gubernamentales a la educación superior y entregar el financiamiento de las universidades departamentales a las regiones empobrecidas, que no tienen recursos y deben al sector financiero más de 3 billones de pesos. El resultado, como lo demuestra el caso de la Universidad del Valle, es la pérdida de su patrimonio, la elevación de matrículas y la implantación de convenios de desempeño que imponen en las universidades los criterios de rentabilidad propios de las entidades privadas. El programa de las llamadas "Úrsulas", junto con el de "madres comunitarias", entrega a la informalidad la preparación de los niños en un periodo decisivo, dejándolos a cargo de personas sin ninguna preparación. El "año cero" sustituye por una sola anualidad todo el necesario periodo preescolar de varios años. La propuesta de instaurar un "nuevo colegio" instituye unidades escolares que funcionen como una empresa privada autogestionada y autofinanciada. Los grados décimo y undécimo se quieren privatizar completamente entregándolos a entidades privadas, con la excusa de que la Constitución exige la cobertura hasta noveno grado. Todas las anteriores no constituyen más que políticas del imperialismo agenciadas por los organismos internacionales para imponer una educación pobre para pobres, es decir, baja calidad para los pobres y mejor calidad para los ricos.

La juventud carece de espacios para la actividad deportiva y cultural y las concepciones neoliberales fomentan entre ella una mentalidad individualista y competitiva que ante la carencia de oportunidades de todo tipo, alimenta el escepticismo y la desmoralización. La falta de solidaridad, de cooperación y de espíritu investigativo están haciendo perder la capacidad productiva a toda una generación. El país lleva quince años de promoción automática en la educación primaria y cinco en bachillerato, generando una mentalidad facilista, un derecho espúreo a la promoción, un repudio anarquista a la existencia de normas y una falta de responsabilidad, perjudicial para la formación de la juventud.

Los jóvenes y estudiantes, que en el pasado libraron importantes luchas en defensa de la soberanía nacional, la educación pública y la democracia en las universidades -como el movimiento estudiantil de 1971- y que han constituido un destacamento avanzado en las luchas populares, sólo recientemente y en forma parcial y circunstancial se han comenzado a reincorporar a la protesta. El movimiento estudiantil, en su mayoría, carece de organizaciones representativas y existe una apatía ante los graves problemas de la educación y la nación. En muchas universidades los dirigentes estudiantiles han abandonado la defensa de la educación, de la universidad y de los estudiantes y se han dejado cooptar por las administraciones a cambio de pequeñas dádivas.

El imperialismo y la oligarquía colombiana promueven una educación sin base científica, desarraigada de la cultura nacional, imbuida de teorías antinacionales, con un énfasis en la promoción de supuestos "valores" que no son más que lugares comunes de ideologías decadentes y desligada del desarrollo económico, cultural y social del país. En Colombia la política neoliberal se ha apoyado en la pedagogía constructivista que renuncia a la transmisión de conocimientos científicos y técnicos, rechaza la objetividad del conocimiento, se apuntala en un individualismo fundamentalista y despoja el aprendizaje de rigurosidad. En ciertos sectores del estudiantado ha hecho mella el planteamiento demagógico neoliberal de que la desigualdad social se resuelve dando prioridad en los cupos educativos a los sectores más pobres, objetivo que, además de no materializarse, simplemente infunde vanas esperanzas en los desheredados y no tiene en cuenta el rendimiento y capacidades de los candidatos.

UNA OBRA DE TITANES: DEFENDER LA EDUCACIÓN PÚBLICA

La juventud debe propugnar por una educación científica y al servicio de la nación y las masas. La lucha de estudiantes y profesores es indispensable para defender la educación pública. Así lo demuestran las conquistas en la historia del movimiento estudiantil colombiano, que logró el cogobierno en 1971, y las de muchos países latinoamericanos en donde la universidad mantiene su autonomía académica y administrativa, admite una proporción mucho mayor de estudiantes que en Colombia y desempeña un importante papel en la sociedad. Lo mismo puede afirmarse de la Ley General de Educación, impulsada y defendida por el magisterio colombiano, que en 1994 conquistó la autonomía de los colegios y escuelas, el gobierno escolar, la dirección colegiada en las entidades territoriales, la defensa de la educación técnica que pretendía suprimirse y la libertad de cátedra, quitándole al Estado el control sobre los contenidos y devolviéndole al maestro su entidad activa de docente, superando la vieja costumbre de que el Ministerio de educación le dictara todo lo que debía enseñar. A pesar de ello, todavía hay quienes defienden que mientras no cambie el sistema no cambiará la educación. Tales posiciones renuncian a la movilización del estudiantado y el profesorado por sus reivindicaciones y rechazan los aportes que pueden hacer al desarrollo nacional, condenando nuestra Colombia subdesarrollada a tener una educación para el subdesarrollo.

El Banco Mundial y el imperialismo sostienen que los cambios en el sistema educativo son el factor determinante del desarrollo económico. Pero en el mejor de los casos sus propuestas se limitan a la generalización de los primeros años de educación, dejando los niveles superiores en manos del sector privado y condenando a los estudiantes sobresalientes y más capaces de los estratos populares a permanecer por fuera de ellos. El Banco Mundial patrocina demagógicamente la idea de que la universidad pública es para la población más vulnerable. Pero la universidad no puede resolver la discriminación y opresión de que son víctimas la mayoría de sectores de la sociedad, labor que corresponde a la lucha de todos los perjudicados por las políticas gubernamentales e imperialistas.

Los cambios en el sistema educativo son necesarios y posibles, pero por sí solos no provocan el cambio social, el cual únicamente se puede lograr con la más amplia unidad de todos los patriotas, obreros, campesinos y capas medias en contra de los grupos financieros, la dominación imperialista y sus representantes en Colombia, luchas a las cuales los jóvenes deben vincularse activamente.

El clima de violencia política dificulta la organización gremial, amedrentando al estudiantado y a los profesores. Para los jóvenes, como para el conjunto de la sociedad, es vital que las contradicciones sociales y políticas no se aborden mediante el terrorismo. El movimiento popular tiene sus propios métodos de lucha masivos y democráticos y el año pasado los paros cívicos, las protestas nacionales del movimiento obrero, los paros nacionales agrarios y otras acciones populares que confrontaron al gobierno pastranista, mostraron que existe una alternativa civil y de masas a la política oficial.

UN PROGRAMA DEMOCRÁTICO Y ANTIN-IMPERIALISTA

La educación debe ser gratuita en todos los niveles, garantizando -con una financiación estatal adecuada- la educación para todos hasta el grado undécimo. Como primer paso hacia la gratuidad, deben congelarse las matrículas.

La educación debe ser científica en sus contenidos y métodos, basándose en lo más avanzado de la ciencia y la técnica, erradicando todo confesionalismo, espíritu dogmático y superficialidad. Hay que equipar satisfactoriamente a todas las instituciones educativas con bibliotecas, laboratorios y demás requerimientos pedagógicos.

Los profesores deben remunerarse adecuadamente. En la educación básica y media no debe haber catedráticos a contrato y en las universidades la mayoría de los profesores deben ser de tiempo completo. Se debe garantizar para toda la población una educación preescolar a cargo de profesionales de la educación. Todo esto es indispensable para garantizar la calidad académica. Asimismo, el restablecimiento de la jornada única diurna garantizará mayor dedicación de los profesores y mayor intensidad en la formación de los estudiantes.

Hay que ampliar la cobertura de las universidades y de la educación secundaria, la cual es muy baja en relación con el nivel de desarrollo del país y comparada con países de desarrollo y población similares. Esta cobertura debe aumentarse anualmente, de manera que garantice un crecimiento en términos reales, o sea que la cantidad de estudiantes universitarios sea cada vez mayor en relación con los que terminen bachillerato.

Los egresados del bachillerato deben tener una formación que les permita ingresar productivamente al mercado laboral o aspirar a continuar su formación en los diferentes programas de educación superior que el país debe ofrecer, uno de los cuales es la educación propiamente universitaria. Los cupos en estos programas deben llenarse con los mejor preparados y más capaces, para lo cual debe contarse con sistemas de evaluación objetivos que no discriminen a las mujeres, los habitantes de regiones apartadas o de bajo estrato social. Los métodos deficientes de evaluación agravan la discriminación de estos sectores, causada por su opresión económica.

Las universidades y programas de educación superior deben contar con un sistema de bienestar social que garantice la permanencia de los estudiantes.

La democracia en la universidad debe materializarse en la participación mayoritaria y decisoria de estudiantes y profesores en la dirección de las instituciones, sobre la base de las organizaciones democráticas de estos. Las formas de participación existentes en la actualidad constituyen una apariencia de democracia, pues se basan en una representación minoritaria. A su vez, la elección de rectores en las universidades públicas es un mero mecanismo consultivo que soslaya la participación mayoritaria y decisoria de estudiantes y profesores en la dirección de las universidades. Los rectores elegidos son reos de la política oficial y en muchas ocasiones su elección es producto de componendas, reemplazando una verdadera participación de estudiantes y profesores. Los gobiernos han convertido la autonomía universitaria en una forma de eludir su responsabilidad de financiar adecuadamente las instituciones. Así se cumple el famoso principio planteado por Mr. Atcon, el profesor estadounidense que recorrió el país en la década del sesenta, de que autonomía es privatización. La universidad está privatizada casi por completo.

El anterior programa puede ser resumido en los siguientes puntos:

  1. Educación gratuita, con adecuada financiación estatal a todos los niveles.
  2. Fortalecimiento de la universidad pública, con suficiente dotación e inversión y profesorado de tiempo completo.
  3. Ampliación de la cobertura con financiación plena por parte del Estado.
  4. Sistema de bienestar estudiantil, con residencias, restaurantes, fomento del deporte y actividades culturales.
  5. Congelamiento de matrículas en la universidad pública y rebaja progresiva de las mismas hasta la completa gratuidad.
  6. Dirección colegiada democrática, con participación mayoritaria de profesores y estudiantes, elegidos popularmente. Creación y fortalecimiento de consejos estudiantiles.
  7. Investigación científica independiente de condicionamientos y al servicio de la nación.
  8. La juventud colombiana debe organizarse, participar en la luchas populares, defender la soberanía nacional y jugar el papel que le corresponde en la lucha contra el atraso, la dependencia económica y el oscurantismo, propugnando activamente por cambios en la educación que contribuyan al avance de la lucha por una Colombia independiente y con una economía firmemente asentada en la ampliación del mercado interno, la elevación del bienestar del pueblo y la defensa de la producción nacional.


lunes, 5 de septiembre de 2011

Declaración de la MESA AMPLIA NACIONAL ESTUDIANTIL -MANE-

Primero Túnez, después fue Egipto, y más tarde en gran parte del norte de África y el medio oriente, luego en España, Irlanda, Grecia e Israel; cientos de miles de estudiantes, desempleados, trabajadores y ciudadanos del común colman plazas y parques, contra un orden económico internacional inicuo y que se encuentra en fase de declive. En América Latina los estudiantes de Puerto Rico, Colombia y otros países se movilizan bajo el norte de la lucha social en Chile que ya completa más de 3 meses de tomas y marchas estudiantiles, cuyo más reciente acto fue el paro obrero-estudiantil de 48 horas.

Se trata de sucesos llevados a cabo en todo del mundo que no pueden ser presentados como aislados. Aunque variadas son sus manifestaciones, definitivamente tienen causas comunes. No son coincidencia si no que obedecen a las más genuinas respuestas de un mundo que no aguanta más, y que clama por auténticos estadios de bienestar y progreso, y en la que Colombia por supuesto no es la excepción.

Teniendo como antesala el convulsionado entorno internacional, más de mil estudiantes pertenecientes a diferentes procesos organizativos de las 32 universidades públicas y del SENA, y más de la mitad de las 48 universidades privadas del país, desde la Guajira hasta Nariño, pasando por Antioquia y los llanos orientales, se hicieron sentir en la Universidad Distrital, para la realización de la primera Mesa Amplia Nacional Estudiantil. De igual manera se hizo manifiesto el sentir unitario, el respaldo y la solidaridad con los estudiantes de secundaria, con los profesores y trabajadores. Nadie a quien le duela la educación quería perderse esta cita con la historia, allí participaron importantes delegaciones que consideran que la defensa de la educación como derecho es un imperativo social y una condición indispensable para el desarrollo nacional.

Bajo esta atmósfera sesionó la MANE, la más grande apuesta del movimiento estudiantil colombiano en décadas, y solo con un contexto de esta naturaleza puede entenderse la magnitud de los avances alcanzados en estas jornadas. En la mesa programática la consecución de un 'Programa mínimo' del estudiantado, se convierte en el principal avance. El Programa Mínimo consta de 6 ejes donde se plasman las demandas y propuestas necesarias para el avance de la educación superior en Colombia: Financiación del Derecho a la Educación, la Autonomía y la Democracia Universitarias, la Calidad Académica, el Bienestar Universitario, las libertades democráticas y la relación Universidad y sociedad. Este programa se erigió con los siguientes objetivos, los cuales a su vez, rigen el conjunto de la agenda de movilización: i) rechazo integral y hundimiento a la propuesta de Nueva Ley de Educación Superior; ii) construcción de una propuesta alternativa de universidad; iii) el fortalecimiento del movimiento estudiantil y iv) el desarrollo de un Paro Nacional Universitario.

En la mesa organizativa la apuesta radicó en fortalecer las Mesas Amplias ya existentes en cada Universidad y región, así como en avanzar en su construcción donde aún no existan, bien sea en el ámbito local, regional o por universidad. Además se definió, que allí en donde existan otras formas de organización, y el debate interno concluya que tales referentes deben permanecer, sin dar el paso hacia las Mesas Amplias, se acogerán los propósitos y criterios de amplitud de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil. Finalmente, la discusión de organización concluyó con la definición de fortalecer o crear espacios de interlocución Multiestamentaria en cada Universidad y región, así como con el conjunto del movimiento social y popular.

De igual manera se integrará un Comité Operativo de la MANE, conformado por dos miembros de cada proceso local, regional o nacional el cual será encargado de coordinar las actividades y jornadas de movilización y cuya primera reunión se llevara a cabo en Palmira, el 10 de septiembre, a propósito de los 40 años del “Programa Mínimo de Palmira”. Las tareas que este Comité habrá de definir son: i) la preparación del Paro Nacional Universitario; ii) la conformación de las comisiones de comunicaciones y publicidad y la de Derechos Humanos; iii) la preparación y el desarrollo de la consulta del 6 de octubre; iv) el carácter del Escenario Nacional Programático; y v) los criterios para la definición de las vocerías nacionales.

En la mesa de movilización, se aprobó un nutrido cronograma de jornadas nacionales de protesta cívica, y el llamamiento a un Paro Nacional Universitario como respuestas del movimiento estudiantil a la Nueva Ley de Educación Superior. Es preciso señalar que la construcción del “Programa Mínimo” fue aprobada por consenso ya que se aprecia que los problemas que suscita esta iniciativa son tanto de procedencia como de contenido y a su vez son insalvables. La ausencia de financiación adecuada de la universidad pública, los créditos usurarios y las matriculas impagables, la negación de la Autonomía y la Democracia Universitarias, el desmonte de los sistemas de Bienestar Universitario, la militarización de los campus, como los que se viven en la UIS o en la de Antioquia, así como la violación a las libertades democráticas y el irrespeto a los Derechos Humanos, la toma del sistema educativo nacional por las multinacionales y universidades corporativas; siguen siendo los problemas estructurales de la educación superior en Colombia y para los cuales la mentada ley antes que resolverlos los agrava.

De tal manera que la agenda de movilización trazada por la MANE se llevará a cabo así: el 7 de Septiembre la gran jornada nacional por la educación junto a los estudiantes de secundaria, FECODE, los profesores universitarios, las madres y los padres de familia, y saldremos a las calles a rechazar la Nueva Ley de Educación Superior y a exigir la educación como Derecho. El 6 de Octubre realizaremos la Consulta Nacional Universitaria, iniciativa que busca un masivo pronunciamiento de la comunidad universitaria en contra de las pretensiones oficiales. El 12 de Octubre iniciaremos un cese de actividades académicas de 48 horas e inundaremos las calles con el conjunto del movimiento social y popular. También se ratificó la convocatoria del Escenario Nacional Programático, que contará con la participación de los demás sectores sociales y políticos, adicionales a los que conforman la comunidad universitaria. La tarea es preparar el Paro Nacional Universitario, nuestro compromiso es con la construcción de una propuesta de educación alternativa, inspirada en el Programa Mínimo y la transformación de las bases de la actual política de educación superior.

Como se evidencia, las conclusiones adoptadas son trascendentales para el desarrollo del movimiento estudiantil y social del país. No en vano, Santos, luego de tan solo 2 días de concluida la primera Mesa Amplia, anunció que retirará del proyecto de ley lo concerniente al ánimo de lucro. Alegó que “no es el momento oportuno" y que dicha propuesta no reunía el consenso tanto en la Unidad Nacional como en la comunidad universitaria. En su alocución omitió señalar que el artículo que dice sustituir ya se encuentra contenido en el Capítulo XI relativo al Comercio de Servicios Transfronterizos del Tratado de Libre Comercio suscrito con los Estados Unidos, y que Colombia pese a haber incorporado un anexo que le permite mantener o adoptar medidas que protejan éste sector, más bien ha dado muestras de querer incluirlo de manera integral como una mercancía más en el acuerdo que el Congreso de ese país se encuentra próximo a ratificar. Así que el retiró de este aspecto no es una concesión del gobierno como pretenden hacer creer a la comunidad universitaria y a la sociedad civil, sino una más de sus continuas formas para distraer el debate y contrarrestar las fuertes manifestaciones sociales y de opinión que se han realizado en contra de esa intención, así como las que están por desarrollarse. Además, dicho anuncio pretende disfrazar la profunda crisis que sufre el sistema de educación superior en Colombia, cuya salida tan sólo será posible en tanto que persista el norte programático y de acción que el estudiantado en su autonomía ha definido en la presente Mesa Amplia Nacional Estudiantil.

La Mesa Amplia Nacional Estudiantil, bajo éstos puntos de propuesta para una educación diferente a la que se nos ha presentado desde el gobierno al día de hoy, hace un llamamiento a los estudiantes de toda Colombia, a lo largo y ancho de nuestra geografía nacional a construir el Paro Nacional Universitario por el hundimiento de la Nueva Ley de Educación Superior, y la construcción democrática de una propuesta de educación diferente.

Para este fin los estudiantes universitarios ya contamos con un Programa Mínimo, es decir, unas banderas de propuesta del estudiantado hacia una nueva universidad. Esta convocatoria a la gran movilización nacional universitaria también va dirigida a todos los estamentos universitarios, al trabajador, al obrero, al indígena, al campesino, a hombres y mujeres de nuestro mapa nacional y a la sociedad en general, a ensanchar el torrente por donde fluya una educación para las necesidades de la sociedad colombiana.

Conscientes de los enormes esfuerzos que requiere la consolidación de este proceso, pero convencidos del momento histórico que nos compete, convocamos a toda Colombia pero en especial a los jóvenes y estudiantes, profesores, trabajadores y directivos a que defendamos la educación como un derecho, y para que luchemos de manera decidida por un nuevo sistema educativo que siente las bases para las transformaciones que requiere el país y así alcanzar la senda definitiva de paz, democracia y soberanía.

CONCLUSIONES DE LAS MESAS DE TRABAJO DE LA MESA AMPLIA NACIONAL DE ESTUDIANTES

MESA DE MOVILIZACIÓN

I. Objetivos de la movilización:

1. Rechazo rotundo y hundimiento de la propuesta de nueva ley de educación superior que impulsa el gobierno de Juan Manuel Santos.

2. Exigir las garantías y los espacios de construcción democrática de una propuesta alternativa de Educación Superior.

3. Fortalecer el movimiento estudiantil colombiano.

4. Llamar al estudiantado colombiano a la construcción de un Paro Nacional Universitario. El comité operativo del próximo 10 de septiembre evaluará la fecha para la hora cero del paro nacional universitario.

II. Agenda:

· 24 de agosto: Jornadas de solidaridad con Chile. Desarrollar actividades culturales dentro de las universidades.

· 25 de agosto: Movilizaciones convocadas por los estudiantes del Sena.

· 7 de septiembre: Jornada Nacional de Movilización.

· 10 de septiembre: Reunión del comité operativo.

· 6 de octubre: Consulta Nacional en las universidades sobre la nueva ley de educación superior.

· 12 de octubre: Gran Jornada Nacional de la mano con todos los sectores sociales. Jornada que en las universidades se hará en el marco de un cese de actividades academias y administrativas de 48 horas.

· Escenario de construcción programática nacional: Durante este semestre se desarrollaran eventos programáticos a nivel local y/o regional en la idea de poder llegar con acumulados hacia el escenario de construcción programática nacional que tendrá lugar el próximo año. El comité operativo tiene la tarea de avanzar en las discusiones acerca del carácter y la metodología de este escenario.

· Propuesta de campaña nacional “educación camino hacia la paz con justicia social”: La próxima reunión del operativo discutirá los elementos centrales de la campaña y los mecanismos para su desarrollo.

[Nota: Ratificamos que este proceso de movilización será construido en doble vía, desde lo local a lo nacional y viceversa, de tal manera que se buscara materializar y retroalimentar, desde las asambleas locales y los otros procesos organizativos, las definiciones nacionales.]

MESA DE ORGANIZACIÓN

1. La MANE se ratifica como un espacio amplio, democrático, pluralista que reúne a organizaciones y estudiantes de instituciones de educación superior, y de educación técnica y tecnológica; la MANE se constituye como escenario de trabajo y lucha por la defensa de la educación como derecho fundamental

2. En el momento la MANE ha hecho énfasis en la unidad de acción, pero en su agenda común trabajará para avanzar en la unidad programática y organizativa del estudiantado colombiano. En todo caso se ratifica que en este momento se luchara principalmente contra la nueva ley de educación superior que está impulsando el gobierno.

3. En su política de unidad con el movimiento social y popular del país, busca articularse con otros sectores y procesos, para avanzar en la defensa del derecho fundamental de la educación y demás derechos sociales. Se buscarán mayores niveles de articulación y coordinación con profesores y trabajadores de la educación a través de la participación en espacios como las multiestamentarias. También se invita a los compañeros y compañeras de Secundaria a dar el debate frente a su participación en un espacio nacional como este. Finalmente se resalta el espíritu de la MANE de convertirse en un futuro cercano en un espacio común de defensa de la educación

4. Uno de los objetivos centrales de la mane es conformar las Mesas Amplias por universidad, municipio y/o departamentales de las cuales podrán hacerse participes los procesos y las personas que se acojan las determinaciones de las mismas y de la MANE. Se hace la salvedad de que en las universidades donde existan otros espacios de organización y el debate interno concluya que es conveniente mantenerlos en vez de crear una Mesa, se mantendrán teniendo en cuenta los criterios de amplitud y se articularan con la MANE. Los criterios de amplitud para pertenecer a una Mesa serán acogerse a las conclusiones de la MANE, de las Mesas regionales donde existan y a la Mesa por universidad.

5. El comité operativo será el espacio encargado de dinamizar y operativizar las decisiones y los lineamientos emanados de la MANE. Aunado a esto, estará encargado de realizar pronunciamientos, declaraciones, artículos, entre otros, siempre orientado bajo los parámetros anteriormente definidos, que sirvan como insumo al conjunto del estudiantado colombiano.

El COMITÉ OPERATIVO deberá tener en cuenta los procesos de cada una de las mesas regionales y locales, y propenderá por la retroalimentación reciproca entre los distintos niveles organizativos.

El COMITÉ OPERATIVO estará compuesto por dos delegados de cada uno de los procesos organizativos de los niveles local, regional y nacional; En la plenaria de esta MANE se conocerán todos los procesos de orden nacional, regional y local que conformarán este comité.

La toma de decisiones en este espacio se dará siempre en el marco de lo definido por la MANE y en todos los casos deberán darse por consenso.

6. En esta sesión de la MANE se define que la próxima reunión del COMITÉ OPERATIVO será el 10 de septiembre de 2011 en la ciudad de Palmira en la cual se deben operativizar las siguientes tareas:

a) Hacer el balance de las jornadas de movilización nacional del 7 de septiembre y discutir sobre la preparación del PARO NACIONAL UNIVERSITARIO.

b) Conformar una Comisión de Comunicación, agitación y propaganda que se encargará de visibilizar el proceso.

c) Crear una comisión de derechos humanos.

d) Conformar un cuerpo de vocería e interlocución.

e) Aclarar el carácter y la metodología del escenario de construcción programática nacional.

f) Discutir acerca de la propuesta de campaña “educación camino hacia la paz con justicia social”.

MESA DE CONSTRUCCION PROGRAMATICA

1. El estudiantado colombiano rechaza de manera integral la profundización de las reformas neoliberales en el país que desde hace tiempo vienen convirtiendo los derechos en mercancías, y que en el caso de la educación se materializan entre otras con propuestas como la Nueva Ley de educación superior presentada recientemente a la opinión pública por el gobierno Santista.

2. En este marco la MANE busca trascender la coyuntura y avanzar en la construcción de un referente organizativo del estudiantado en Colombia para dar una lucha a corto, mediano y largo plazo. De esta manera se constituye como un escenario de encuentro de voluntades políticas del estudiantado, en la que por el momento se ha hecho énfasis en elementos de unidad de acción pero en la que se reconoce la necesidad y se proyecta la unidad programática y organizativa para enfrentar al régimen y para proponer y construir una alternativa de universidad y de educación de cara a los desafíos del país.

3. En este sentido hemos acordado unos elementos mínimos que se recogieron alrededor de seis ejes como la base del PROGRAMA MÍNIMO del estudiantado universitario entendido como una herramienta de articulación política y que define los puntos estratégicos con los que se proyecta la lucha a mediano plazo y largo plazo para alcanzar la universidad que queremos; así también este programa mínimo será la guía, el horizonte de construcción, del pliego.

4. En consonancia con el punto anterior se convino en la necesidad de avanzar en la construcción de un pliego como herramienta reivindicativa frente a problemáticas que de manera coyuntural nos están afectando, y que nos ayudará también a avanzar en la unidad del estudiantado; hacemos claridad en que este pliego que se esta construyendo no contradice la construcción programática mas amplia y general sino que por el contrario se encuentra estrechamente relacionada con esta.

5. Tanto el programa mínimo, como el pliego que se esta construyendo, están determinados y/o subordinados a los dos acuerdos centrales alcanzados por el estudiantado colombiano en esta primera sesión de la MANE:

- Rechazo rotundo y hundimiento de la propuesta de nueva ley de educación superior que impulsa el gobierno de Juan Manuel Santos.

- Exigir las garantías y los espacios para la construcción democrática de una propuesta alternativa de Educación Superior.

PROGRAMA MINIMO DEL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL UNIVERSITARIO:

I. FINANCIACIÓN.

- Aseguramiento de la Educación como un derecho y una condición necesaria para el desarrollo nacional, dejando de lado su connotación como mercancía; por tanto, rechazamos de manera íntegra y categórica la nueva Ley de Educación Superior y cualquier medida que tenga como propósito abrirle paso al lucro y a las transnacionales de la Educación Superior, incluyendo aquellas que hacen parte de los Tratados de Libre Comercio y los demás acuerdos comerciales que Colombia adopte sobre ésta materia.

- Financiamiento estatal adecuado a la Universidad Pública sin condicionamientos, es decir, un aumento de los recursos estatales a la base presupuestal que dé cuenta de los costos generados en seguridad social, nomina docente y administrativa, programas de bienestar, aumento de cobertura, investigación e inversión; entendiendo que la financiación adecuada de la Universidad Pública es la principal herramienta para el aseguramiento de la calidad. De igual manera exigimos el pago de la deuda del Gobierno Nacional y de los entes territoriales con las Universidades Públicas.

- El Estado debe ejercer la función de inspección, vigilancia y control sobre los montos de las matriculas en universidades colombianas. Los estudiantes debemos ser participes de manera real en las discusiones que al interior de las universidades se dan en torno al particular. Estas medidas deben estar orientadas hacia el congelamiento de matriculas en universidades privadas y públicas, y la gratuidad en las universidades públicas hacia el futuro tanto en pregrado como en posgrado.

- Eliminación de exenciones tributarias a las multinacionales extranjeras e incremento progresivo de la participación estatal en la explotación de recursos naturales, en particular los de tipo minero-energético y reducción del presupuesto destinado tanto a la guerra como a la deuda pública, a fin de garantizar una financiación plena para la educación. Rechazamos las privatizaciones de empresas de servicios públicos pues ello es causa fundamental de su carestía. Parte de las utilidades de las empresas de servicios públicos deben destinarse al financiamiento de las Universidades Públicas.

- El Icetex solo será financiado por recursos del estado, no provenientes de deudas con el sector financiero ni con organismos multilaterales de crédito, así tendrá la capacidad de reestructurar sus créditos, suspender los procesos contra quienes no han podido pagarlos y refinanciar los restantes. Los nuevos créditos que se otorguen serán sin capitalización de intereses y contarán con subsidios por logros académicos, deportivos y culturales.

II. DEMOCRACIA Y AUTONOMÍA

- Fortalecimiento de la autonomía universitaria, entendida ésta como:

i) La facultad de las Instituciones de Educación Superior para definir sus cuerpos de gobierno de manera democrática y con participación mayoritaria de los estamentos que componen la comunidad universitaria en la dirección de la misma; ii) Definición autónoma de sus agendas investigativas, programas, currículos y contenidos por miembros de la comunidad académica como herramienta para asegurar la calidad,; iii) Determinación autónoma del gasto, en base a las necesidades, prioridades y definiciones de la comunidad universitaria. La autonomía entendida en estos términos solamente puede desarrollarse en tanto la comunidad académica cuente con garantías efectivas para la participación, por tanto exigimos el descongelamiento de la planta docente de las Universidades Públicas y el aumento de los profesores de tiempo completo y de dedicación exclusiva. Rechazamos los procesos de acreditación y las pruebas Saber Pro –antes Ecaes-, en primer lugar, por no constituir un referente real que dé cuenta de la calidad académica y en segundo lugar, por constituir una flagrante violación a la autonomía académica de las Universidades colombianas. Bajo ninguna circunstancia se puede entender que en virtud de la autonomía universitaria se obligue a las Universidades Públicas a basarse en sus propios esfuerzos económicos para garantizar su funcionamiento e inversión.

III. BIENESTAR

- Entendemos que el bienestar universitario es un componente integral de la formación académica y por tanto éste debe ser ofrecido directamente por las Universidades y no a través de concesiones. Con este sistema se deben asegurar las elementales prestaciones como salud, alimentación, vivienda, transporte y el ejercicio de actividades deportivas, culturales y artísticas. Las garantías laborales para los trabajadores hacen parte del mismo, por tanto exigimos la contratación directa de los empleados de las universidades y el respeto a sus derechos salariales y prestacionales.

- Exigimos que los recursos para bienestar universitario sean contemplados por los recursos que destina el Estado a las Universidades Públicas y que estos integren su base presupuestal.

IV. CALIDAD ACADÉMICA

- Comprendemos que la calidad académica solamente será producto del respeto y garantías para que las comunidades académicas puedan desarrollar de manera optima su ejercicio académico, por tanto exigimos: i) El descongelamiento de la planta docente de las Universidades Públicas del país y el aumento progresivo de docentes de tiempo completo y de dedicación exclusiva; ii) El respeto y garantía para la libertad de cátedra en todas las universidades colombianas; iii). El aumento de cobertura en educación superior sobre la base de financiación adecuada a la Universidad Pública, como principal herramienta para asegurar la calidad. Finalmente rechazamos la estandarización de contenidos, política desarrollada a través de diferentes herramientas como los procesos de acreditación, las pruebas Saber Pro o la implementación de competencias académicas, ciudadanas o laborales.


V. LIBERTADES DEMOCRÁTICAS

- Respeto y apoyo tanto a las expresiones culturales, políticas y sociales al interior de las Universidades, como a las formas de organización estudiantil, profesoral y sindical. Exigimos garantías para el goce efectivo de los Derechos Humanos, por tanto rechazamos la militarización de los campus y la persecución hacia miembros de la comunidad universitaria. De igual manera nos oponemos a las acciones tendientes a estigmatizar al movimiento universitario y exigimos respeto a la movilización social y al derecho a la protesta, así como a las demás libertades y derechos democráticos.

VI. RELACIÓN UNIVERSIDAD-SOCIEDAD

- La universidad colombiana debe estar ligada a las necesidades más sentidas del pueblo colombiano y al desarrollo y progreso de su mercado interno, por tanto su actividad académica e investigativa estará a su servicio. Esto implica que la universidad pública debe discutir y adoptar un nuevo modelo pedagógico que afronte, discuta y genere alternativas con respecto a las problemáticas sociales, económicas y medio ambientales que afronta el país, vincule a los grupos étnicos y culturales que componen la nación colombiana. Entendemos que la extensión universitaria hace parte integral del quehacer académico de la universidad motivo por el cual este debe responder a las prioridades y necesidades del pueblo colombiano.

- Exigimos la creación de hospitales universitarios plenamente financiados por el Estado al servicio de la comunidad académica y de los colombianos y no al servicio del sector privado.

- El estudiantado exhorta la concreción de la solución política y dialogada al conflicto armado interno que vive el país.


PLIEGO DEL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL COLOMBIANO (EN CONSTRUCCIÓN):
El pliego será construido en el marco del programa mínimo y en el contexto de la lucha que la MANE desarrollará contra el proyecto de Educación del Gobierno de Juan Manuel Santos.

-Rechazo integral al proyecto de nueva ley de educación superior

-Rechazo a las universidades con ánimo de lucro.

-Congelamiento de matrículas

-Desmilitarización de campus universitario.

-Garantías del reconocimiento de los procesos organizativos

-Ampliación de la planta docente

-Elección democrática de los cuerpos colegiados.

PROPUESTAS

  • Generar documento en contra de todas las formas de militarización de las universidades, que empiece a contener elementos del programa que es el de la defensa de las libertades democráticas.
  • Propiciar espacios locales y regionales para profundizar debates en lo programático, fortaleciendo las dinámicas de comunicación entre los distintos niveles de articulación nacional.
  • El posicionamiento de la MANE como proceso en la COMOSOCOL con el ánimo de fortalecer el movimiento estudiantil en el movimiento social y popular colombiano.
  • Levantar la consigna desde la MANE: POR LA DEMOCRACIA, LA SOBERANÍA Y LA PAZ.
  • Articular la pelea de los estudiantes universitarios con el SENA y secundaria (a éste último convocarlo pero sin quitarles su autonomía organizativa), en la medida que buscamos trascender de la organización gremial universitaria, hacia la consolidación del movimiento estudiantil que busca construir una nueva educación. Que desde el comité operativo se los convoque para el paro nacional.
  • Participar en el Encuentro regional de trabajadores estatales, en el que se tocarán asuntos referentes a la Ley 100 y la nueva Ley de Educación Superior que será en el departamento del Cauca, confirmarán fechas. Desde la MANE nos reafirmamos en el rechazo a los TLC y a todos los proyectos de explotación de la tierra y a la Ley de Seguridad Ciudadana que demuestra el interés del gobierno por dividir al movimiento social y popular en Colombia.

Por el hundimiento de la Nueva ley de educación superior.

Por la construcción democrática de una propuesta alternativa de educación superior.

Por la unidad y el fortalecimiento del movimiento estudiantil universitario.

TOD@S AL PARO NACIONAL UNIVERSITARIO

POR LA DEMOCRACIA, LA SOBERANÍA Y LA PAZ, LA UNIDAD ESTUDIANTIL.


Fecha: 20 y 21 de Agosto de 2011

Lugar: Universidad Distrital, Bogotá